A continuación, les presento las mas comunes y clásicas frases y dichos de pescadores.

• El cebo es el que engaña, no el pescador ni la caña.
• La paciencia, la observación y la dedicación hacen al buen pescador.
• Señuelo grande, pez grande…
• El pez es el único animal que crece después de muerto.
• Si el día está sin viento y lloviendo, vete al río corriendo.
• «Al pescado dormilón, se lo traga el tiburón».
• «Con la Mujer y el pescado, mucho cuidado».
• «El Zorro pierde el pelo pero no las mañas, yo pierdo el pez pero no la caña».
• El peor día de pesca supera con creces al mejor del trabajo.
• En enero y en febrero, las cañas al ropero.
• «Hay días de pesca que lo único que se pesca son historias y amigos «
• «Yo voy a pescar porque los pescados no hablan»
• «El pescador va en busca del pez más grande, al pasar las horas se conforma con el más pequeño».
• «Mi mayor preocupación es que cuando yo muera y no esté, mi mujer venderá mi equipo de pesca por lo que le dije que me costó.»
• Cuando el río suena agua lleva.
• El que nace para Bagre… ¡nunca llega a Pejerrey!
• En casa de pescador… costillar al asador
• A río revuelto… ¡levar ancla!
• «La pesca es un descanso para la mente, una alegría para el espíritu, una distracción para la tristeza, un calmante para los pensamientos inquietos, un moderador de pasiones, una fuente de satisfacciones que engendra hábitos de paz y de paciencia en todo aquel que la profesa y la practica». Henry Wotton.
• «El pescador deportivo no es un «mata pescado», no es un ser que abusa de su inteligencia para depredar. Benditos sean los peces si en algún momento mitigan el hambre de un pescador. Y prohibidos deberían ser quienes sacrifican piezas inútilmente por ego o por demostración de poder». Haig Vartazian.
• «Desde siempre el agua ofrece uno de los tantos enigmas de la naturaleza. Para desentrañarlo el hombre ha creado sistemas y modalidades que permitan acceder a ese reino prohibido y obtener así parte de su sustento. Eso es la pesca comercial. En la deportiva, el hombre sigue siendo el cuaternario animador del cuerpo coruscante y escurridizo que se agita en el extremo del sedal. Cada captura, un triunfo; no se trata de cantidades o de determinada especie valiosa. Es, simplemente y con medios exclusivamente propios, vencer al misterio, anotarse una pequeña victoria en la lucha biológica que, al final, resultará vencedora». Rodolfo Perri.
• «Después de andar tantos años en esta actividad creo que los pescadores deportivos sólo pueden definirse de esta manera: «Son una raza de amigos». Una amistad que no se termina en los hombres sino que allí recién comienza. Una amistad que se extiende a los peces, a los ámbitos, a la forma de actuar. Y quiénes no se sienten así, nunca serán pescadores deportivos». Por: Nello Príncipe.
• «No pesques por querer ser más que el otro, Pesca Porque Dios te dio permiso».
• «El trabajo es para la gente que no pesca».
• Cuando el pez pequeño come, el grande quiere.
• Quien pesca un pez, pescador es.
• A río revuelto, ganancia de pescadores.
• Por la boca muere el pez.
• «Cuanto más enredado está su sedal, más peces habrá Alrededor de las de la carnada».
• «El pescar con caña, requiere paciencia y maña».
• «La pesca es algo así como la poesía: hay que nacer pescador»
• «Un hombre tiene que creer en algo. Creo que me iré a pescar».
• «Si el trabajo no te da oportunidad de pescar deja mejor el trabajo».
• «Si le regalas un pez a hombre, le quitas el hambre por un día, si le enseñas a pescar, lo tendrás sentado en una lancha TODO EL DÍA»
• «Dios dijo «ve a pescar» no dijo nada de anda atrabajar, sacar la basura, cuidar los niños, etc «
• «La paciencia, la dedicación y la observación hacen al buen pescador»
•  «Dale un pez a un hombre y comerá un día; enséñale a pescar y comerá siempre».
• «La devolución que hagas hoy será tu pesca de mañana»
• «Se busca novia bonita y con dinero… de preferencia con lancha de pesca Indispensable mandar foto de la lancha y el motor».
• «Cuando el río suena, algún músico se está ahogando»
• (…) Hay pescadores que parecen fascinar el pescado, atraerlo irresistiblemente. El público desocupado que los contempla, cree que ejercen una especie de magnetismo sobre su presa como la culebra sobre las ranas; hasta cuentan que truchas y carpas, arrastrados a su pesar, van a morder el fatal anzuelo. No es así, sin embargo, sino a fuerza de ciencia como esos pescadores han llegado a ser para nosotros especies de magos ordenando a sus víctimas la marcha en procesión hacia su anzuelo. Elisee Reclus

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