Es el aparejo de pesca más antiguo y más sencillo. Suele constar de un largo sedal que se arrolla sobre la tablilla de corcho y que lleva dos anzuelos con cebo natural y un plomo. La tablilla de corcho posee las siguientes dimensiones: Un centímetro o algo más de espesor, 10-12 centímetros de anchura y 15-18 centímetros de longitud. Conviene que la tablilla sea de corcho, de modo que flote si por casualidad cae al agua y permita, además, fijar los anzuelos sin estropear su punta.

La longitud del sedal varía según la profundidad a la cual se quiere pescar; de cualquier forma nunca será menor de 50 metros. Los sedales son de nylon de un solo hilo o formados por filásticas muy delgadas, oscilando su diámetro según la fauna presente en la zona de pesca. Si se trata de peces pequeños se utiliza de 0,30; si, por el contrario, se piensa que pueden picar peces de longitudes mayores se utilizan los de 0,35, 0,40, 0,45 y 0,50. Estas medidas indican el calibre del nylon. El de 1,00 indica el diámetro de un milímetro y el de 0,50 el de medio milímetro. En el extremo del sedal se fija un grillete giratorio, cuyo tamaño estará en relación con el diámetro del nylon. El plomo, cuya misión es la de mantener el sedal tenso, no tiene un peso preestablecido, sino que el tipo y el peso se eligen en función de la profundidad del mar, de las corrientes y de los peces que pretendan capturarse.

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