Historia de los Señuelos Del
Desde 1960, Industrias Del fabrica señuelos y cucharas artesanales en la República Argentina, y son un icono de colección para muchos pescadores, y objeto infaltable en la caja de pesca. De gran funcionamiento y adaptabilidad en los ambientes acuáticos, son recomendables para la pesca de la Tararira, Lisa, Surubí, Dientudos, Pejerrey, Dorados, Truchas, Salmón, entre otros.

Página principal: http://www.industriasdel.com/
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Gran trayectoria la de señuelos DEL en Argentina.
SMD
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Alguien sabe donde se pueden comprar las cucharitas Del ?
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Por mercado libre las puede conseguir señor
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Hola tengo algunos, 1170034730 soy jonatan.
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eso es la historia? es como decir la historia de escualo; desde el año 50 castorani fabrica reeles para pescar pejerrey variada corvina y tiburon, señuelos para lisa? cual seria el modelo? hay filmacion de una lisa tomando un señuelo?, peor aun hay un señuelo especifico para lisa?
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Si tiene algo más agregar señor, bienvenido sea. Saludos.
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El oreno cardenal número 1
por Koyote · Publicado febrero 2, 2008 · Actualizado febrero 22, 2013
Cuenta la leyenda, que hace ya más de 20 años un preadolescente concurría asiduamente a sus primeras excursiones de pesca.
Esto ocurría en los ámbitos que le resultaban posibles, en función de sus opciones movilidad. Se lo veía entonces en algunas lagunas de la provincia de Buenos Aires, en algún arroyo de la zona de Pilar y también en el Río de la Plata, en la zona de Olivos o Martínez. Se movilizaba a pie o en bicicleta.
A veces su padre lo llevaba a lugares mas lejanos en busca de las primeras tarariras. A veces lo acompañaba su primo. A veces algún amigo del barrio. A veces su tío.
Este individuo a quien vamos a bautizar con el nombre de “Koyote” desarrollaba así, inconcientemente, sus primeras armas en la pesca.
Su padre no sabia de eso, solo tenia las ganas de iniciarlo en “algo”, sin poder ayudarlo mas que en la compañía.
Su caja de pesca en esa época tenia elementos hoy desterrados. Boyas de pejerrey, reels pesados, plomadas y demás artilugios para la pesca en general, sin que importase demasiado la modalidad. De hecho, esa persona no sabia de modalidades de pesca. No tenía instrucción alguna al respecto más que el instinto de mirar a quienes ocasionalmente terminaban rodeándolo en esas salidas.
En esa misma caja de pesca, no se sabe bien como y perdido entre todos esos artilugios había un Oreno de DEL, color cardenal, numero 1. Koyote no sabia bien para que servia ese muñequito ni como usarlo.
En los ámbitos en los que se movía y con la información circulante en esa época (alguna Weekend que esporádicamente lograba leer en la peluquería del barrio) no podía hacer demasiado… Tratemos de situarnos en el tiempo… debe haber sido el año 1985 o algo así… No había internet y el acceso a la información era más complicado que hoy en día. Y los que sabían del tema no compartían demasiada información con un pibe.
El Oreno pasaba su tiempo en la caja, brillante, impoluto, sin un solo rayón, sin conocerse bien cual era su función.
Hasta que un día alguien le dijo lo que había que hacer con ese muñequito… no era simplemente tirarlo al agua y esperar, como se hacía con la carnada.
Había que tirarlo y recogerlo, tirarlo y recogerlo…
¡Como si eso fuese a provocar algo!… A quien se le puede ocurrir que un pez vaya a morder un muñequito de madera… y encima rojo y blanco! si las mojarras son plateadas! a quien se le ocurre…
Pasó algún tiempo más… el Oreno seguía en la caja…
Hasta que un día pasó lo increíble.
Era verano, hacía mucho calor, mas de 30 grados. Esa tarde el Rio de la Plata estaba en plena bajante. El agua estaba a mas de 100 metros delante del muelle… habia que entrar caminando para llegar a ella.
El viejo que vivía en la punta del muelle levantaba su espinel cerca de donde Koyote trataba de enganchar “algo”, una boga, un bagre, lo que sea, usando grandes anzuelos con carnada.
En su total ignorancia, le pregunta al viejo ¿que había? ¿con que encarnar? ¿que estaba saliendo?
El viejo se acerca, mira con detenimiento la caja y dice… Nene, tirá ese muñequito y vas a ver….
No pasaron mas de 30 segundos… Koyote enganchó el señuelo y el viejo dijo: “pará! ponele un líder de acero…”
Un minuto mas… y el Oreno nadaba en las aguas del Río de la Plata.
No nadó mucho… un metro o dos de donde cayó… Una lanza plateada, espectacularmente lo toma entre sus dientes de sable y empieza a retorcerse en el aire con el oreno en la boca.
El viejo dice: “ves? eso hay: chafalotes… me comen todo lo que se engancha en el espinel… ¡y encima no me los puedo comer, no tienen nada de carne!”
La adrenalina fluía por las venas de Koyote gracias al viejo, a la pesca y al Oreno cardenal número 1.
El chafalote se soltó un metro antes de llegar a mis manos. Pero fue una de las pescas mas espectaculares de mi vida.
Gracias a ese dia, hoy en mi caja de pesca solo hay muñecos, señuelos de todas las formas, tamaños y colores. Nunca más hubo ni plomadas ni boyas.
El oreno cardenal numero 1 sigue ahí. Mordido, rayado.
Ya no va nunca al agua, pero sigue ahí en la caja, y de seguro les debe contar a sus nuevos compañeros que cuando estaba solo en esa caja, un chafalote le clavó los dientes…
y le perdonó la vida en el último segundo.
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Buenas! Tengo señuelo Del Paimun N°10 en caja! Si alguien lo quiere comprar dejo mi mail: nanchu1987@gmail.com
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